jueves, octubre 13, 2005

tercero

el otro día casi muero... bienvenido al paraíso. somos pocos los que hemos podido ver a la cara a la muerte y ser fuertes para no dejarnos llevar.
la mayoría de las veces ocupo mi pensamiento en cosas tontas, me ilusiono con cosas sin importancia. sigo durmiendo contigo a pesar de todo. si pudiera meterme dentro de ti lo haría. me gustaría tener una casa dentro de tus ojos marrones, o tal vez en tus manos. siempre pensé en vivir en tu boca, fina, pudiendo tocar tus dientes, que tu lengua viniera a invadir la sequía.
no estaría mal habitar en algún lunar de tu cuerpo, sabes cual es mi favorito. volvería a ser tu mejor guardián si no me temblara el pulso, si pudiera enfocar mejor la vista, si pudiera volver a ser un caballero de brillante armadura...
ahora me tiembla el pulso, veo cosas extrañas, no tengo armadura, sangro constantemente, mis alucinaciones y paranoias me vapulean.
la sangre me hace ver todo de color rojo.
mientras caigo por el abismo repito una y otra vez: te quiero, te quiero, te quiero,... pero nada frena esta caída.