martes, marzo 28, 2006

en mis delirios nocturnos

en mis delirios nocturnos te veo. agarras con tus dos manos mi cabeza y las pones en tu regazo. acaricias mi pelo y me dices, lindo, tranquilo, todo pasará. me calmas y despierto, y ya has desaparecido, vuelvo a ponerme nervioso, mi respiración se acelera. para no gritar de desesperación y despertar a toda la casa muerdo mi puño, y sigo con ganas de gritar. muerdo más fuerte, hasta que noto el sabor salado de mi sangre. empiezo a llorar por el dolor, pero aun así no logra superar al dolor que supone tu perdida. con mi puño izquierdo golpeo cada parte libre de mi cuerpo. el cansancio calma este estado de locura extrema. ahora sólo quedan estas lágrimas, y el sabor de mi propia sangre en la boca.