martes, noviembre 01, 2011

la entrada a la mina

estoy con federico, sentados en la entrada de la casa, por la tarde, después de comer. sopla una brisa que nos quita el calor que hace al salir del refugio. el viento mueve las ramas de los árboles. a lo lejos se escuchan risas y gritos de niños, de la casa sale música. yo estoy leyendo y levanto al cabeza, federico está abrazado a su ukelele con una sonrisa de oreja a oreja, como un niño pequeño, y mirando al cielo.
-¿estás contento federico?
con otra sonrisa me enseña todos sus dientes y sin decirme una palabra afirma con la cabeza.