viernes, noviembre 21, 2008
jueves, noviembre 20, 2008
lunes, noviembre 17, 2008
hecatombe
su piel es suave y hace pilates por las mañanas. se pone a hablar, y gesticula con los brazos, no sé de qué manera, pero los objetos acaban esquivando cada aspaviento suyo.
-soy muy torpe.
yo termino las frases que ella empieza, cuando se queda en blanco y no recuerda la palabra exacta. al principio siempre se muestra un más distante conmigo, prefiero cuando toma tres gin tonics y está más cariñosa. sus besos saben un poco amargos por la ginebra.
aprieta fuerte mi mano.
-¿te hago daño?
-no, pero me lo acabarás haciendo.
y ella piensa que habló de cuando desgarra los tendones de mi mano con sus pequeños dedos. entonces deja de pinzarme la mano, y yo insisto para que lo vuelva a hacer.
-hecatombe, viene del griego, y se usaba para designar a un sacrificio de cien bueyes.
hecatombe se designará al momento en el que tu te vayas, y vuelvas al país húmedo y raro en el que te refugiaste hace cuatro años
-¿acaso te has parado a pensar…?
-no, nunca suelo hacerlo, es una fea costumbre.
-soy muy torpe.
yo termino las frases que ella empieza, cuando se queda en blanco y no recuerda la palabra exacta. al principio siempre se muestra un más distante conmigo, prefiero cuando toma tres gin tonics y está más cariñosa. sus besos saben un poco amargos por la ginebra.
aprieta fuerte mi mano.
-¿te hago daño?
-no, pero me lo acabarás haciendo.
y ella piensa que habló de cuando desgarra los tendones de mi mano con sus pequeños dedos. entonces deja de pinzarme la mano, y yo insisto para que lo vuelva a hacer.
-hecatombe, viene del griego, y se usaba para designar a un sacrificio de cien bueyes.
hecatombe se designará al momento en el que tu te vayas, y vuelvas al país húmedo y raro en el que te refugiaste hace cuatro años
-¿acaso te has parado a pensar…?
-no, nunca suelo hacerlo, es una fea costumbre.
viernes, noviembre 14, 2008
jueves, noviembre 13, 2008
miércoles, noviembre 12, 2008
sentencia de muerte
sin quererlo yo, tu llueves sobre mi. sin darme cuenta, me ahogas. me ahogo en tu vaso de agua, en tu pequeña lluvia, con esta insignificante gota de lluvia tuya. como lluvia te dejas caer sobre mi, te balanzas sobre mi cuerpo desprevenido, sobre mi cabeza sin cubrir.
y pienso que, en realidad, quieres acabar conmigo, que has regresado para asfixiarme, y pienso en las mil y una maneras que tienes para hacerlo, en los mil y un motivos que tienes para hacerlo.
duermo en tu cama, y pones la almohada sobre mi cara, y no pongo resistencia porque dejas que me vaya faltando el oxigeno poco a poco, y no pongo resistencia porque yo quiero morir.
tus manos se convierten en un lazo corredizo alrededor de mi cuello, y soy juzgado por crímenes de guerra, y estoy siendo lentamente ejecutado.
sentencia de muerte. condenado a morir ahogado por una gota de tu lluvia.
y pienso que, en realidad, quieres acabar conmigo, que has regresado para asfixiarme, y pienso en las mil y una maneras que tienes para hacerlo, en los mil y un motivos que tienes para hacerlo.
duermo en tu cama, y pones la almohada sobre mi cara, y no pongo resistencia porque dejas que me vaya faltando el oxigeno poco a poco, y no pongo resistencia porque yo quiero morir.
tus manos se convierten en un lazo corredizo alrededor de mi cuello, y soy juzgado por crímenes de guerra, y estoy siendo lentamente ejecutado.
sentencia de muerte. condenado a morir ahogado por una gota de tu lluvia.
lunes, noviembre 10, 2008
viernes, noviembre 07, 2008
coco chanel
las señales hacían presagiar algún inesperado evento. la vida, como el péndulo de foucault, se aleja y se acerca, repite situaciones, incluso momentos parecidos a los anteriormente vividos, en los que se involucra a los mismo personajes principales de esa acción.
primero llegó el oído, ese sonido de días pasados, y recuerdas.
un día, un cruce de palabras, lo achacas a casualidades.
y de repente todo empieza a encajar, reaparecen personas, recuerdas sus caras. es esa música, acompañada por el olor a chanel, el juego de tus manos, tus dedos como pinzas pellizcando los tendones de mis manos. es el tacto de tu piel, la cama en el futón, las sábanas, las viejas cámaras de fotos.
es esa música. es todo culpa de esa música y lo bien que hueles a chanel.
primero llegó el oído, ese sonido de días pasados, y recuerdas.
un día, un cruce de palabras, lo achacas a casualidades.
y de repente todo empieza a encajar, reaparecen personas, recuerdas sus caras. es esa música, acompañada por el olor a chanel, el juego de tus manos, tus dedos como pinzas pellizcando los tendones de mis manos. es el tacto de tu piel, la cama en el futón, las sábanas, las viejas cámaras de fotos.
es esa música. es todo culpa de esa música y lo bien que hueles a chanel.
fuera se destruyó la civilización occidental. tras estas puertas cayeron las ciudades, todos los monumentos descansan en ruinas, comidos por las plantas.
-podemos aprender mandarín.
-dentro de poco tiempo, las demás civilizaciones irán cayendo también.
-podemos quedarnos encerrados aquí.
-es lo mejor que podemos hacer.
-podemos aprender mandarín.
-dentro de poco tiempo, las demás civilizaciones irán cayendo también.
-podemos quedarnos encerrados aquí.
-es lo mejor que podemos hacer.
miércoles, noviembre 05, 2008
el mesías negro
aquí tenéis al salvador. el mesías negro tiene el poder. habrá un cambio radical en nuestras vidas. desde el mismo preciso momento en el que apoye su mano sobre una biblia nos representará a todos. todas las ilusiones, todas las esperanzas que siempre tuvimos.
siempre convencidos de que todo va a cambiar, de que nada volverá a ser como antes, de que tendremos un mundo mejor.
y nunca cambia nada, todo es como antes, como siempre ha sido.
siempre convencidos de que todo va a cambiar, de que nada volverá a ser como antes, de que tendremos un mundo mejor.
y nunca cambia nada, todo es como antes, como siempre ha sido.
martes, noviembre 04, 2008
lunes, noviembre 03, 2008
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