- oye, mira, que te desprecio. jamás había llegado a pensar que esto me fuera a pasar contigo. simplemente se ha ido formando, me caías bien, te quise y ahora te desprecio.
pero no pasa nada, no es malo... para mí, desde luego. este desprecio es anormal, no sabes lo bien que me hace sentir, las ganas que tengo de estrangularte me están liberando, las ganas que tengo de chillarte a la cara me alivian, aunque no vaya a hacer ninguna de esas cosas.
¡hay que joderse!, me estoy aliviando un huevo. pensar que imaginé que valías la pena, pensar en todo lo que pensé, pensar en todo lo que hice...
no quiero volverte a ver, no quiero volverte a hablar.
¿te he dicho que te desprecio?
te desprecio.