como hacia fermín de pas, gustaba de subirse a sitios altos en determinados momentos, para poder observar desde una altura conveniente todo aquello que le rodeaba. al contrario que el canónigo, no deseba sentirse poderoso observando aquella panorámica, más bien le gustaba porque le hacia sentirse pequeño, o porque la contaminación nunca dejó que las estrellas se pudieran observar detenidamente en aquella ciudad, y él imaginaba constelaciones con las luces artificiales de aquella galaxia entramada de bombillas y neones.
nunca lo hizo por miedo, nunca fue por afán de huida. a veces todos necesitamos observar las cosas que nos suceden desde un punto alto. ¿quién sabe? si así podemos vislumbrar alguna solución, o al menos calmarnos con la tranquilidad del silencio, y desde las alturas, arrojar el mismo pensamiento que nos atormenta.
pensando en fermín de pas, y en ese fragmento de la regenta, su mente se acabo perdiendo en reflexiones del todo lejanas al motivo que le hizo subir hasta tan alto punto, o tal vez sus reflexiones nunca estuvieron tan cerca.