aquí estamos chica pez. nadaste mucho hasta llegar a esta orilla. las millas se iban perdiendo a tu paso. yo no vine nadando, llegué hasta aquí caminando, muchas otras veces corriendo. pero aquí estamos, uno frente al otro, sin importar lo que quedó atrás. ahora tan sólo importa la forma en la que me miras, la forma en la que tú me haces sentir. ahora mismo no hay nada en este mundo comparable a la forma en la que tu me abrazas por las noches, a tus dulces besos en una habitación a media luz.
aquí estamos… y yo no sé qué puedo ofrecerte, salvo lo poco que pueda quedar en mi interior, lo poco que puede quedar de lo mejor de mi. la mejor versión de mi mismo en estos momentos.
no importarán los días, ni las horas mientras tu sigas nadando a mi lado, y yo siga corriendo con la vista fija en ti.